Todos los niños necesitan mucho calcio para sustentar sus huesos en crecimiento. Pero no todos los niños obtienen lo suficiente. Las buenas fuentes de calcio incluyen:Cloruro sódico: el cuerpo del bebé no está preparado para procesar la sal, por lo que se debe evitar su consumo hasta los dos años de edad. La OMS recomienda nutrir lactancia